La construcción y el diseño de oficinas ha evolucionado significativamente en los últimos años adaptándose a las nuevas necesidades tanto de los trabajadores como de las empresas. A día de hoy, esta progresión se ve reflejada en nuevas tendencias que buscan mejorar la eficiencia, la sostenibilidad y el bienestar de los empleados, creando espacios más dinámicos y beneficiosos para cada uno de ellos.
La idea de crear espacios más sostenibles y respetuosos con el medioambiente continúa siendo uno de los objetivos más perseguidos en el sector de la construcción y el diseño de oficinas. En 2024, la preferencia por usar materiales ecológicos está más arraigada que nunca y las empresas ya invierten en edificios con certificaciones como LEED (Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental)o BREEAM (Método de Evaluación Ambiental del Establecimiento de Investigación de Edificación), que garantizan un menor impacto ambiental.
En este entorno nacen nuevas maneras de convivir entre el medioambiente y las personas. Con la sostenibilidad como medio, surge el concepto de biohabitabilidad, una nueva filosofía arquitectónica cuyo objetivo es el de armonizar y cuidar a la vez de las necesidades ambientales y de las humanas a través de:
En la búsqueda por crear espacios que mejoren la eficiencia, el bienestar y las relaciones entre trabajadores de una misma compañía, las empresas de construcción y diseño de oficinas incorporan cada vez más nuevas herramientas tecnológicas, como la Inteligencia Artificial, la realidad virtual o el Internet de las Cosas (IoT), en sus proyectos.
A través de ellas es posible dotar de nuevas funcionalidades a espacios que anteriormente eran estáticos, otorgándoles un nuevo significado y mejorando no solo la experiencia laboral, sino también las posibilidades de crear diseños funcionales y estéticos.
Ese es el caso, por ejemplo, de la Inteligencia Artificial. En un entorno corporativo en el que crece la deslocalización y el teletrabajo, herramientas que mejoran la comunicación y la colaboración entre empleados de una misma empresa son un valor en alza. Las empresas encargadas de la construcción y el diseño de oficinas tienen en cuenta este potencial y, por ello, es cada vez más común la creación de espacios inteligentes que se optimizan a través de la interacción con las personas, o mobiliario que se adapta automáticamente a las preferencias del usuario.
De esta misma manera, el Internet de las Cosas (IoT) también se ha hecho un hueco en las nuevas estructuras de oficina. A partir de él se facilita la utilización de sistemas de gestión de edificios inteligentes, los cuales permiten controlar y monitorizar el uso de energía, la seguridad y otros aspectos operativos en tiempo real mediante la instalación de sensores de iluminación y agua, detectores de ocupación o herramientas de controles de la calidad del aire, entre otros.
Durante muchos años, la construcción y el diseño de oficinas ha puesto el enfoque en otorgar a todos los trabajadores las mismas comodidades. Sin embargo, esta tendencia transmite un mensaje implícito que no siempre es real, y es que no todas las personas trabajan en las mismas condiciones ni de la misma manera.
Por ello, y con el trabajo híbrido como abanderado de un movimiento más inclusivo y más diverso, la construcción y diseño de oficinas en la actualidad abraza un punto de vista en el que todas las realidades tienen cabida mediante diferentes facilidades, como, por ejemplo, espacios accesibles y mobiliario adaptable.
De esta manera, las empresas son cada vez más partidarias de ofrecer a sus trabajadores facilidades que cubran necesidades y preferencias particulares como la promoción de espacios flexibles, con la promoción del hot desking para fomentar la interacción entre empleados de diferentes departamentos; o el diseño de oficinas en un espacio abierto y diáfano, promoviendo la colaboración interdisciplinaria, entre otros.
A través de este enfoque no solo se mejora el día a día de los empleados. La diversidad y la igualdad se han convertido en dos aspectos fundamentales en el entorno corporativo, promoviendo el sentimiento de valoración y respeto entre los trabajadores. Este logro ha sido impulsado, en gran medida, a través de cambios estructurales de su lugar de trabajo.
Las tendencias en la construcción de oficinas en 2024 reflejan un cambio hacia espacios más sostenibles, flexibles y centrados en el bienestar de los empleados. La tecnología inteligente, el diseño inclusivo y la atención a la experiencia del usuario están transformando la forma en que trabajamos y vivimos en el entorno laboral. Estas tendencias no solo mejoran la eficiencia y la productividad, sino que también promueven un ambiente de trabajo más saludable y equitativo. Las empresas que adopten estas tendencias estarán mejor posicionadas para atraer y retener talento, así como para enfrentar los desafíos del futuro.